Mostrando entradas con la etiqueta plantas. Mostrar todas las entradas
Mostrando entradas con la etiqueta plantas. Mostrar todas las entradas

:: costilla de Adán

En primavera, la temperatura sube, el aire se humedece, brotan nuevas hojas en los árboles y las flores se abren. ¿Qué hacer con tu vida si eres influencer en primavera? He aquí la respuesta: una Costilla de Adán (Monstera Deliciosa) en el rincón más cuidado de la casa se ha convertido en una estampa casi viral en redes sociales. La fotogénica planta trepadora, procedente de selvas tropicales mexicanas, es la reina del interiorismo e Instragram, y aunque es una planta fácil de cuidar, que no da muchos problemas, es posible que, si no sabes mucho del tema, te esté resultando un reto.

imagen::nicolás barahona. Living room set up: Costilla de Adán junto a una bandera pirata y una reproducción de “triángulo ocre” 1986 de Eduardo Sánchez-Beato. Feliz con la Deliciosa, ready para lucir en Instagram

Para mejorar mi faceta “monstera” he asistido recientemente a un taller de Interiorismo vegetal, impartido por Rosario Ortiz, alma de “Jardín Villa-Mari” que organiza en su patio periódicamente cursos y talleres sobre cuidado de plantas Tras la sesión cada uno de los participantes recibió un maravilloso regalo: Una frondosa Costilla de Adán y un manual de supervivencia. “Hacer un trasplante es como someter a una planta a una operación de corazón abierto”, compara Rosario. “Entonces hay que hacerlo en las condiciones más óptimas, por eso es mejor realizarlo en primavera”. Asistir a esta sesión nos ha hecho mirar con más atención aspectos de nuestras amigas las plantas que atraviesan transversalmente el proyecto vegetal. Rosario nos dejó algunas preguntas abiertas, a modo de conclusión para que mantengamos la Costilla de Adán más sana y bonita jamás vista. Preguntas que siguen manteniéndose abiertas, que nos preocupan y de las que nos gustaría seguir hablando en en el proceso de crecimiento de nuestra planta: 

¿Qué significan la interdisciplinariedad y la transdisciplinariedad en la primavera? ¿Qué punto de la casa es mejor para colocar la planta, para evitar tensiones? ¿Qué significa aprender a cuidar por relaciones?  ¿Cuánta agua necesita? ¿Qué hacer con las raíces aéreas o si le han salido manchas en las hojas? ¿Qué significa una plantación performativa, hoy, cuando todo es performativo? Contestar a estas preguntas sobre nuestra propia experiencia con la Costilla de Adán supone siempre un doble reto, un ejercicio de revisión y reacercamiento a las posiciones que ocupamos como influencers y amantes de las plantas. 

:: carpintero

 
imagen::retrato de Amelia Ortiz

::en cada familia hay un artista, en mi familia hay varios. Está Marcos, su madre Amelia y el padre de ésta, que era carpintero. Un día al cambiar la puerta de la entrada de mi casa, encontramos dentro del armazón un hoja de madera que llevaba escrito a lápiz: “Esta puerta está hecha en el año 1.973 por el carpintero Cástulo Ortiz . Rocas 19-12-73”. Me sentí entonces como Lord Carnarvon en el Valle de los Reyes. El hallazgo renovó el interés del mundo occidental por la ebanistería. Siempre quise tener uno de esos cofres taraceados que mi tío hacía con rodajas de madera. Su hermano Teodorico también era artista, pintaba al óleo, junto a él asistí a mis primeras clases de pintura con Antonio Arias en París. He aquí un retrato que me hizo Amelia Ortiz cuando yo tenía 17 años. Siempre tendré 17 años en este retrato de mi querida prima Amelia.
 
 
Estudio II calber:: de izquierda a derecha, de arriba a abajo: 1.  ESTAMPA 22. DDR Art Gallery. Reproducción, Roger Sanguino - “Tutta effigies XVII y XVIII”, (Retrato resguardado XVII). Precio habitual  €25,000.00 cada figura 2. Reproducción. Renato Guttuso. Bottiglie, vecchia locandina in cornice, firmato Guttuso. 3. Proyecto retrato. Amelia Ortiz, lápiz sobre papel. 4. Escultura escayola “ángel”. 5 Portada de “Fuegos” de Ismael Serrano. La Bella Varsovia / Poesía 2019 6. Foto familia, primera comunión. 
 
En cada unidad familiar hay un carpintero, fabrica ataúdes
 
El padre fabrica su propia muerte. Se afana en la figura. Cuida la forma de los dedos. Los signos del desfallecimiento.
Estoy pensando qué me enseñó mi padre. Estoy recordando: no quise aprender nada.
Lo que no quería decir es: tendré siempre diecisiete años.
El padre construye los órganos del hijo a su semejanza. Se confía a la piedad.
El padre se construye dentro del hijo. En madera. Luego arde.

de Fuegos. La Bella Varsovia, 2019. Ismael Ramos. Premio Nacional de Poesía Joven 2022. El jurado ha destacado su obra 'Lixeiro’ por “la potencia de su imaginación poética, capaz de emprender un canto generacional entonado desde un desencanto reconciliado que conjuga ironía y nostalgia”

 

:: pensar

¡Cómo me dejas que te piense!
 | pensar en ti no lo hago solo, yo. | 
Pensar en ti es tenerte, | 
como el desnudo cuerpo ante los besos,
 | toda ante mí, entregada.
 | Siento cómo te das a mi memoria,
 | cómo te rindes al pensar ardiente,
 | tu gran consentimiento en la distancia.
 | Y más que consentir, más que entregarte,
 | me ayudas, vienes hasta mí, me enseñas | recuerdos en escorzo, me haces señas | con las delicias, vivas, del pasado,
 | invitándome.
 | Me dices desde allá
 | que hagamos lo que quiero
 | unirnos al pensarte.
 | Y entramos por el beso que me abres,
 | y pensamos en ti, los dos, yo solo.

Pedro Salinas. Razón de amor [25] (Versos 1104 a 1121)
 
 
collage:: dolor 2022, calber

PIC neurología
 
::diagnóstico principal: nervios inespecíficos, probable somatización de estrés. No impresiona de patología neurológica. Criterio semántico: “Pensar en ti es tenerte” Observamos en esta fórmula como se asemeja un pensamiento con el padecimiento.  El pronombre “ti” apunta a la afección en que se piensa, los nervios, el mareo, el dolor.  Por otro lado, el verbo “es”, en presente, nos indica que el pensar en el dolor constata la presencia de éste. Pensar que se tiene, o tener miedo a tenerlo es incluso peor que tenerlo, y en parte Salinas tiene razón, ya que cada ser humano es dueño de sus procesos psicológicos y sólo nosotros podemos transformar o deformar la realidad en nuestra mente.  


imagen::calber
 
P.S.C. Mujer de 55 años. Refiere que “padece de los nervios” desde hace 5-6 años: nota acúfeno muy intenso en oído izquierdo tras lo cual nota un mareo con giro de objetos con cortejo vegetativo. Esto es recurrente y tiene un cuadro cada 15-20 jornadas. No se sigue nunca de cefalea. Cada cuadro es autolimitado. Percibe una sensación de nerviosismo más difuso, diario persistente. En el contexto laboral, cuando tiene más trabajo se incrementa esta sensación. Tras finalizar su proceso estresante (gestiona una posada) mejora progresivamente. Actualmente está bien. En este tiempo se le ha hecho un estudio muy completo: FM craneal, Holter ECG, Eco-doppler de TSA y EEG: todo normal

Procedimientos: Fundoscopia.
Plan: Ginkgo. 2 cap/día durante 1 mes
Biloba García, Sara. FEA/ADJUNTO



 
imagen::calber

Un año después del estallido de la bomba de Hiroshima, en la primavera de 1946, a cerca de un kilómetro de distancia del epicentro de la explosión, un viejo Ginkgo destruido y seco empezó a brotar. Se transformó en símbolo del renacimiento y objeto de veneración, por lo que se le llama «portador de esperanza». El árbol fue documentado y fotografiado como el ginkgo de la bomba atómica de Hosenbo en Hiroshima. Después del desastre se despertó la curiosidad en la ciencia médica por estudiar las propiedades curativas del Ginkgo biloba. En el cerebro de cada uno de nosotros un día cualquiera se produce una explosión nuclear que nos conduce a la muerte. Esto le ocurrió a PSC un día como hoy hace 49 años, padecía de “los nervios”, no pudo, no supo, se rindió al pensar ardiente.

:: girasol


imagen::calber
 
::mi tío amanece el día con sus matemáticas, sus conejos y sus plantas. Antes pensaba que mi tío era raro pero ahora que estamos estudiando la sucesión o serie de Fibonacci me pregunto, si todo está tan ordenado en el cosmos como en la vida de mi tío.

En esta sucesión  infinita de números naturales 1, 1, 2, 3, 5, 8, 13, 21, 34, 55, 89, 144, 233, 377, 610, 987, 1597, 2584... cada número, salvo los dos primeros, es igual a la suma de los dos anteriores. Por ejemplo, 8 = 5 + 3, 13 = 8 +5, 2584 = 1587 + 987, etc. A los elementos de esta sucesión se les llama hijos de Fibonacci. Fue descrita en Europa por Leonardo de Pisa, matemático italiano del siglo xiii también conocido como Fibonacci.

Esta serie aparece en un número asombroso de disciplinas matemáticas, así como en la naturaleza, por ejemplo en las ramas de los árboles, en la disposición de las hojas en el tallo, en las flores de alcachofas y girasoles, en las inflorescencias de la coliflor romanesco, en la configuración de las piñas de los pinos y hasta en la reproducción de los conejos. Así que mi tío es un hijo de Fibonacci casi sin saberlo, y cada mañana riega sus plantas y habla con sus conejos en homenaje al cociente final de los números de Fibonacci.